
25 marzo 2010

14 marzo 2010
Para este descanso de primavera, fui a tres ciudades en California: San Diego, Los Angeles y San Francisco. El propósito de estas vacaciones era buscar y visitar universidades por ejemplo Stanford y Berkley pero pudimos relajarnos y divertirnos también. Visitamos Venice Beach en Los Angeles, un lugar turístico pero muy artistico. Había muchos vendedores del otro lado de los tiendas comerciales, que ponían su mercancía en mesas afuera. Esta variaba con cada vendedor. Por ejemplo un hombre estaba vendiendo pulseras bellas con conchas de mar y otro grababa nombres en pedazos de madera y los vendía. Cuando yo recientemente estaba en Savannah, Georgia había vendedores como estos. Por ejemplo yo compré una rosa que el mercader hacía con hojas de arboles Palmettos. Miré el proceso de crear las rosas y era increíble. Él podía hacerlas con ojos cerrados. Cuando hago viajes, me encanta comprar el arte de los que viven alli porque pueden usar los materiales nativos y los transforman en arte. 
Suscribirse a:
Entradas (Atom)